El titulo de esta entrada lo dice todo. Cuando hace unos días se habrió la primera flor del mume se la enseñe a los niños para que la viesen, (hay que ir haciendo afición) enseguida Unai la quiso oler. Al ver al mayor el peque empezó, a mi también, a mi también.
Unai.
Asier.
Asier es muy gracioso porque como todavia no sabe oler, lo que hace es poner esos morritos y resoplar.
Carlos es un placer poder compartir esa afición con los que tendrán la satisfacción de continuar nuestra obra en un futuro.
ResponderEliminarPD últimamente estás muy activo, se nota el despertar de nuestros árboles.
Un abrazo.
Si que lo es Santi, sobre todo cuando te dicen que te quieren ayudar como me ha pasado este sábado con Unai.
EliminarNo queda otra que estar activo. El sábado me hice un maratón de trasplantes, me levanté a las siete de la mañana y en cuanto empezó a amanecer salí para fuera, a pesar de que había solo un grado y medio, me puse al tema y ya no paré hasta las tres de la tarde para comer. En estas fechas estamos todos igual, medio locos ;))).
buen futuro le esperan a tus arboles.
ResponderEliminarun abrazo
Eso espero madera.
EliminarUn abrazo.
Para formar un buen equipo, nada como cuidar la cantera y la tuya parece asegurada. Menuda cara de pillos.¿a que se disfruta más así? Habrás pasado una mañana de sábado intensa pero inolvidable.
ResponderEliminarUn abrazo.
A la cantera hay que mimarla y mediante el juego irles metiendo el bonsai para que poco a poco vaya calando.
ResponderEliminarAl final el sábado no deje que me ayudase el mayor porque con esa temperatura que había se me hubiese quedado pajarito. Ya habrá más ocasiones, lo importante es que ya se va ofreciendo.
Un abrazo.